
La 67ª edición del Festival de la Canción de Eurovisión está cerca de comenzar (en mayo), y este año acogerá en su escenario una de las expresiones artísticas más representativas de la cultura española: el flamenco. Después de casi tres décadas, el género musical volverá a estar presente en uno de los festivales musicales con más tradición en Europa.
La última vez que España llevó flamenco a Eurovisión fue en 1993, cuando Remedios Amaya interpretó “Quién maneja mi barca”. Su actuación no tuvo gran repercusión; de hecho, dejó a España en el último lugar de la competición. Esta vez, la responsabilidad recae en la talentosa Blanca Paloma, quien obtuvo el codiciado pase al festival tras ganar la segunda edición del Benidorm Fest, celebrada el pasado 4 de febrero.
Tanto el público como el jurado quedaron cautivados con la canción interpretada por la alicantina, “Eaea”, una nana que mezcla el flamenco con la música electrónica cuyo video oficial se estrena hoy (9 de marzo).
“Creo que después de 40 años, Europa está más preparada para propuestas diferentes, y creo que ‘Eaea’ va a llamar la atención y no va a pasar desapercibida. Es la primera canción de la historia de Eurovisión por bulerías, entonces es un orgullo”, comenta Blanca Paloma en exclusiva para Billboard Español.
Para ella, la nana, un canto entonado por generaciones de madres trabajadoras para arrullar a sus hijos, es universal: “A todo el mundo nos han cantado alguna vez una nana”, asegura.
Antes de arrasar en el Benidorm Fest 2023 y convertirse en la representante de España al festival más grande de Europa, Blanca Paloma había trabajado incansablemente como licenciada en Bellas Artes, realizando trabajos en escenografía durante una década.
Sin embargo, desde temprana edad la música desempeñó un papel protagónico en su vida. En lugar de tener una sala de juegos en casa, tenían una sala de música donde ella, su madre y hermanos se reunían para escuchar cassettes y vinilos de artistas como Madonna, Elvis Presley, Aretha Franklin, Lola Flores y Rocío Jurado. “Cantábamos y bailábamos por horas”, recuerda.
Blanca Paloma nació en Alicante, España, en 1989 y se mudó a Madrid en el 2014, cuando empezó a trabajar tanto detrás como sobre los escenarios. A lo largo de su carrera, participó en diferentes grupos musicales versionando temas con influencias mediterráneas, latinoamericanas y marroquíes.
Presentarse al Benidorm Fest no estaba en sus planes, y mucho menos llegar a Eurovisión. “Era muy feliz en mi zona de confort detrás del escenario, pero fueron apareciendo personas en mi vida que me decían ‘es que tienes algo cantando que es especial’, pero como para mí era lo cotidiano no entendía”, dice.
Sin embargo, en 2021 fue invitada por TVE para poner voz a la banda sonora de la serie documental Lucía En La Telaraña con la canción “Secreto de agua”, con la cual también se presentó en el Benidorm Fest 2022, quedando en quinto lugar. “El jurado y los eurofans valoraron mucho mi actuación porque encontraron que en esa puesta en escena había algo diferente y especial. Aunque quizás entendían que no era la canción para Eurovisión”, dice a Billboard Español.
Fue tras esta experiencia que decidió que quería tener su propio repertorio y empezó a trabajar con el productor José Pablo Polo y el dramaturgo Álvaro Tato en la composición de “Eaea”. El tema está inspirado en su abuela, a quien le debe su pasión por el flamenco, y con este se animó a tocar nuevamente la puerta de TVE y presentarse al Benidorm Fest 2023, del cual resultó ganadora.
Su puesta en escena y dominio del escenario la han hecho merecedora de elogios por parte del jurado y ha sentido el respaldo del público. Ahora se mantiene enfocada y decidida a llevar el espíritu del flamenco y el cante-jondo a Liverpool, Inglaterra, donde se celebrará el Festival de Eurovisión el próximo 13 de mayo.
Este año, el concurso internacional de canto que anualmente organiza la Unión Europea de Radiodifusión (EBU) marcará un hito en su historia, ya que sus seguidores en países no participantes podrán votar en línea por primera vez. Esta decisión busca fortalecer el poder del público en los resultados y reconocer el alcance mundial del evento. La lista completa de países elegibles se publicará cerca de la fecha de inicio.
Blanca Paloma ha estado involucrada en todos los aspectos de su actuación. La artista busca mantener la esencia y el estilo que la hicieron ganadora del Benidorm Fest para transmitir una experiencia única y auténtica, repleta de emoción.
“Vamos a intentar plasmar la puesta en escena en Eurovisión lo más parecida posible al Benidorm Fest”, dice, “porque creo que hemos logrado un resultado muy particular que no se suele ver en televisión”.